El ecoturismo, base para nuestro desarrollo

En el Geoparque, al geoturismo lo llamamos ecoturismo; no porque sea un turismo geológico, como entienden algunos, ni mucho menos, sino porque estamos en un geoparque.
Para la Organización Mundial del Turismo TME (OMT), el ecoturismo debe reunir las siguientes características:
1. La principal motivación de los turistas está ligada a la naturaleza, así como a las tradiciones y culturas que puedan existir en el entorno.
2. La interpretación del patrimonio es un elemento necesario.
3. Frecuentemente se ofrece a pequeños grupos de la mano de operadores especializados,y los productores son empresas locales.
4. Reduce los impactos negativos que se generan.
5. Contribuye a la conservación de espacios naturales con atractivo turístico al conseguir:
• Aportar un beneficio económico para quienes gestionan la conservación de la comunidad y del espacio natural.
• Para los habitantes del territorio puede ser su profesión y una fuente de ingresos.
• Sensibiliza a propios y turistas sobre los beneficios de la conservación del patrimonio natural y cultural.

Fuente: The British Ecotourism Market, UNWTO 2002

La Declaración aprobada en el congreso Ecotusimo celebrado en Daimiel en 2017 dice: «El Ecoturismo es un viaje a un espacio natural que contribuye a conocerlo, interpretarlo, disfrutarlo y, al mismo tiempo, conservarlo, sin afectar al entorno y generando un impacto positivo en la población local». Ambas definiciones van en la misma línea y el Geoparque de la Costa Vasca se suma a esta filosofía.

Resulta innegable que el turismo es una actividad económica y, por tanto, genera impactos en el entorno. Estos impactos pueden ser buenos o malos, como los que genera la industria. No cuestionamos la necesidad de un sector económico industrial fuerte aunque tenga impactos negativos, ya que, salvo excepciones, forma parte de nuestra naturaleza y nos da riqueza y así lo defendemos.

A la par que la industria, el turismo nos sigue resultando un sector extraño. Conociendo los efectos adversos que ha tenido en algunos lugares mal gestionados o en los que se ha utilizado el modelo equivocado, demonizamos al turismo. Aunque nosotros somos turistas responsables cuando vamos a otros lugares, a menudo tenemos una opinión contraria de los que vienen a visitarnos.

En los últimos años el turismo ha sufrido un fuerte aumento y ha sido generalizado porque viajar se ha democratizado. Lo que en otro tiempo hacían unos pocos hoy se ha convertido en imprescindible para cualquiera y eso ha generado otro tipo de consecuencias.
Los debates acerca del modelo turístico son innumerables y se han incluido en la agenda de prioridades de muchos pueblos de la zona, especialmente de las localidades costeras. Nosotros, en el Geoparque y en los tres municipios que lo componen, tenemos claro que el ecoturismo es nuestro modelo turístico.

Además de las visitas de contenido más geológico, propuestas como los talleres de talos de Lastur, las visitas a la iglesia de Deba, el 'Enigma del Euskera' o la ‘Planta de olas de Mutriku’ completan nuestra oferta geoturística. Esta oferta se basa en la interpretación del patrimonio, tanto natural como cultural. La interpretación mejora y enriquece la experiencia del visitante, ayudándole a comprender la importancia del lugar que está visitando y a relacionarlo con las propias experiencias.

La interpretación mejora y enriquece la experiencia del visitante, ayudándole a comprender la importancia del lugar que está visitando

Siempre habrá quien se acerque a la ermita de San Telmo, se haga un selfie y se vaya; o, peor aún, quien espere el regreso de Danaerys a Rocadragón y quiera revivir las risas que le provocó Ocho apellidos vascos. Hay diferentes motivaciones y razones para venir al Geoparque, pero un único mensaje será difundido: el respeto a la naturaleza y a los modos de vida del lugar.

Nuestro gancho no son estas películas y series mediáticas. Nosotros contamos historias interesantes y sorprendentes y eso es precisamente lo que engancha a la gente. Cómo se ha creado el paisaje que estás admirando, su importancia y cómo lo han cultivado y transformado los ciudadanos que lo han habitado manteniendo su cultura y tradiciones durante años... Estos son los ingredientes que tejen el hilo conductor de nuestra historia.

El geoparque es mucho más que un producto de marketing: en la base está su contenido garantizado por la ciencia y eso es precisamente lo que da sostenibilidad al proyecto. No pasa de moda, no queda anticuada y, para tener cien millones de años, se conserva muy bien.

La investigación del flysch comenzó hace más de cien años. A lo largo de los años se han realizado descubrimientos y teorías importantes cuyos resultados hemos incorporado a nuestra historia. No paramos de enriquecer el relato, porque lo que hoy se conoce no es lo que se conocía hace diez años. Esto despierta curiosidad y puede convertir la visita al Geoparque en un hábito, más allá de una iniciativa puntual. Hay que seguir profundizando en el conocimiento para alimentar las historias y hacerlas cada vez más atractivas.

El difícil y, en general, frágil equilibrio entre la conservación de los valores naturales y culturales de las zonas protegidas y el desarrollo socioeconómico de estos territorios, convierte al ecoturismo en el modelo turístico ideal para el Geoparque de la Costa Vasca.