El Geoparque de la Costa Vasca atrae numerosos visitantes en Semana Santa

El buen tiempo ha acompañado esta Semana Santa al gran número de visitantes que ha disfrutado del Geoparque de la Costa Vasca. Los datos han sido muy positivos en Deba, Mutriku y Zumaia, tanto por el número de visitantes que han acudido a las oficinas de turismo, como por las visitas guiadas y salidas organizadas en el Geoparque.

Los tres primeros días de Semana Santa fueron los que más gente atrajeron al Geoparque, es decir, del 6 al 8 de abril. El Geoparque ha organizado, un año más, atractivas actividades dirigidas al gran público para dar a conocer el patrimonio cultural, natural y geológico de Deba, Mutriku y Zumaia, lo que ha permitido a cientos de personas conocer de cerca la diversidad del territorio. En cuanto al origen de las personas que han participado en las visitas guiadas, cabe destacar que el número de guipuzcoanos ha aumentado considerablemente, constituyendo la mayoría de los visitantes de Euskal Herria, junto a navarros y vizcaínos. La mayoría ha optado por la reserva online para realizar sus compras, siguiendo con la tendencia de los últimos años. Según las encuestas recogidas tras las visitas guiadas, las cuestiones más valoradas han sido el trato recibido (9,5/10) y las explicaciones de las guías (9/10).

Los datos de las oficinas de turismo de Deba, Mutriku y Zumaia reflejan que entre los que nos han visitado desde el Estado los más numerosos han sido los procedentes de Cataluña y Madrid. Cabe destacar que también se han acercado muchos viajeros desde Aragón, Valencia y Castilla y León.

Educadora en Algorri
Atraídos por la vista del flysch, cientos de personas han recorrido los acantilados entre Deba y Zumaia. Durante los días de vacaciones de Semana Santa han podido conocer de primera mano los trabajos que la Diputación Foral de Gipuzkoa acaba de realizar en el emplazamiento. Con el objetivo de garantizar la seguridad de los visitantes y evitar el desgaste que sufre el entorno, la diputación ha delimitado la zona con cuerdas y sendas cubiertas con guijarros.

Por otro lado, durante las vacaciones de Semana Santa, por primera vez una educadora ha estado trabajando en hacer un recuento del número de visitantes, ofrecer consejos e información a los asistentes y recoger los papeles y plásticos acumulados, entre otros aspectos.